Muchos deportistas destinados a la élite de la disciplina elegida, pierden su chance de triunfar y llegar a los peldaños más altos al declinar en el esfuerzo y la voluntad para entrenar y mejorar sus innatas condiciones. Es así que por ello y otros motivos que van desde la falta de adaptación y la fortaleza mental para superar escollos, regresan a sus hogares, cansados de la competencia feroz, el desarraigo y la lucha diaria, a veces egoísta por triunfar que los desgasta.
Otro y muy especial es el caso de Santi Pérez, arquero, un chico ayacuchense surgido en las inferiores de Defensores que hace dos años en el 2016, a raíz de sus destacadas actuaciones tuvo su chance de una prueba en Ferrocarril Oeste capitalino «Fue por un contacto que concretó el Pampa Báez, que venía de ese club. No lo dudé, armé los bolsos y me fui. Rendí bien la prueba y quedé», comenzó diciéndonos Santi, un chico humilde, risueño, seguro de sí mismo, que no le escapa al sacrificio para lograr el objetivo. A quien le debíamos esta nota que por un u otro motivo, se fue postergando.
¿Cómo te fue en Ferro?
«Me fue bien, quedé en 7ma. división donde hice toda la temporada, sufriendo un poco la intensidad de los entrenamientos y la enorme puja que se desata entre los jugadores. Ocurre que sobre final de año, hubo cambio de técnicos y me dejaron libre».
Un golpe duro
«Sí realmente. Pero estando en la pensión viendo qué hacer, surgió la posibilidad de ir a Barracas Central el club del presidente Chiqui Tapia de la B Metro. Allí estuve una semana entrenando y fiché para jugar la temporada 2017 en 7ma. No tuvimos un buen año, diría malo, pero todo cambió radicalmente cuando llegó el profe Pablo Lambermont, un técnico de las divisiones mayores del ascenso y ex jugador de Barracas en la «B».
Con él mejoramos mucho, el trabajo fue más intenso, a tal punto que este año en 5ta. donde fui titular toda la temporada fuimos subcampeones».
Y ahora Santi?
«Según lo que me comunicaron los dirigentes en enero me tengo presentar para realizar la pretemporada con la reserva, que tiene un plantel destacado con mayoría de chicos del club, a cargo del profesor Alejandro Milano».
Qué objetivos has trazado?
«Quiero ser arquero profesional en algún club, para ello me entreno y voy sorteando muchos obstáculos que se presentan en el fútbol. Nada es fácil, pero tengo mucha fe en lo que vendrá. Estoy muy integrado con mis compañeros, superé la etapa del que recién llega. Tengo muchos amigos en el club. Sé que mi hora va a llegar, lo digo convencido, de lo contrario no hubiese completado 2 temporadas en un medio que no te regala nada».
Estás entrenando?
«Sí, descansé unos días luego de una dura temporada y comencé a trabajar con el «Pampa» Báez, un gran amigo, pero ahora se fue a Ferro de Olavarría y trataré de seguir con los chicos, dándole duro para estar bien cuando me llamen».
Santi Pérez, fue un gusto charlar con él, un arquerito que se abre paso en el fútbol de AFA. Algo para nada simple. Se tiene fe. Condiciones no le faltan, actitud tampoco. Anótelo.-
OMA