Panorama político bonaerense: Vidal, un «comodín» electoral de Cambiemos

Luego de los esfuerzos dedicados a ordenar el enrarecido frente interno, María Eugenia Vida concluyó que sobre sus espaldas recaerá una parte sustancial de la campaña para que Mauricio Macri sea reelecto. Pero a la vez se convenció de que para que esa estrategia funcione, la economía deberá experimentar un repunte perceptible para el común de los mortales a más tardar en junio, porque de lo contrario ambos corren serios riesgos de caer derrotados en las urnas.
(Por Andrés Lavaselli, de la redacción de DIB).-
El diagnóstico sobre la coyuntura que encierra esa percepción puede parecer elemental, pero no es compartido por todo el oficialismo. En la Gobernación descreen del peso relativo que puedan tener factores extra económicos del voto, al menos mientras no mejore el bolsillo de la gente de a pie. Es una mirada opuesta a la de la jefatura de Gabinete nacional, donde confían en que el hartazgo de la corrupción kirchnerista o del populismo, sin más, pueden aún jugar un rol.
El punto de encuentro es la Gobernadora. Vidal conserva niveles de aceptación que vuelven atractiva su figura por encima de la del propio Macri. La foto del miércoles con la radical Silvia Elías de Pérez, postulante de Cambiemos en Tucumán, es un ejemplo. A Vidal el pedido le llegó a través de Daniel Salvador, que le habló de al menos otros dos postulantes radicales, ambos patagónicos, que quieren también su afiche con la dirigente más taquillera de Cambiemos.
En La Plata advirtieron que en la Casa Rosada no disgusta ese protagonismo. Y por eso se pusieron a definir el modo en que la Gobernadora aportará al sostén de la figura de Macri, mientras espera de que la economía permita una recuperación. La mirada general pasa por dar primacía a la gestión, por lo que ya está casi listo un extenso manual que cuenta lo que se hizo. Terminarán de afinarlo el fin de semana que viene, durante el último «retiro espiritual» del gabinete bonaerense previo a la campaña.
Preocupaciones
Ese foco en la gestión de Vidal es el segundo paso de un plan cuya próxima estación es la campaña propiamente dicha. La primera, fue el trabajo sobre su frente interno, que llevó adelante junto al propio Macri hace unos días. El principal resultado fue la eliminación del llamado «Plan V» (que la Gobernadora reemplace al presidente como candidato o se sume a su fórmula) de la agenda pública. El segundo, la señal al radicalismo de que sigue siendo el aliado estratégico en PBA.
Ambos ítems, de todos modos, son problemáticos. La carpeta incautada al falso abogado Marcelo D´Alessio con información sobre la Gobernadora puso sobre la mesa la delicada cuestión del espionaje interno. Para colmo, índices que surgen de esos documentos indujeron la sospecha de que detrás de D´Alessio actuó un sector de la AFI previamente sospechado de controlar a Vidal, a su ministro de Seguridad, Cristian Ritondo y a la diputada Elisa «Lilita» Carrió.
La cuestión tuvo la credibilidad suficiente para que se realizaran consultas de máximo nivel entre Nación y Provincia. En el núcleo íntimo de Vidal tranquiliza el vínculo de largo tiempo que mantienen varios de ellos, especialmente el jefe de Gabinete, Federico Salvai, con la segunda de la AFI, Silvia Majdalani, encargada de la operatividad de esa agencia. A ella, según sospechas que no han sido confirmadas, iban dirigidos los informes.
En cuanto la UCR, las certidumbres que recibió el vicegobernador Daniel Salvador respecto de su postulación parece haber bastado para mantener a la sustancial de esa fuerza alineada con Cambiemos en la Provincia. Pero acá también hay tensiones. El sector de Ricardo Alfonsín y Juan Manuel Casella ensayan un acercamiento explícito a Roberto Lavagna. Puede que no sea significativo en términos de estructura política, pero podrían convertirse el destino de votos radicales «desencantados», la categoría electoral a la que apunta en forma prioritaria toda la estrategia de Cambiemos.
Esos radicales no son los únicos retazos de la estructura tradicional de la política bonaerense que cree que Lavagna puede ser una opción válida. Un sector de origen peronista que ahora está incluido en Cambiemos cree lo mismo. Aunque en este caso espera a ver si la estrella de Exministro sigue en ascenso o deja de brillar antes de convertirse en una opción de poder real, con chances de ingresar en un ballotage, antes de ensayar cualquier movimiento. (DIB) AL

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario
Por favor ingrese su nombre