Se están concretando diversas tareas en el Complejo Recreativo y Deportivo Comunal del Club Independiente. Específicamente, en la denominada «Casita Azul», donde se efectúan remodelaciones que dotarán al salón comedor y de reuniones de mayor amplitud. También se ubicarán de forma conveniente los amplios ventanales.
Mientras éstas y otras mejoras se llevan a cabo, ronda en los corrillos directivos de la entidad dueña de casa, la posibilidad de mejoras muy considerables en el campo de juego de fútbol. Según versiones que nos merecen fe, en ese todavía posible proyecto figura la reparación del alambrado perimetral; construcción de vestuarios con sus correspondientes sistemas sanitarios; mejoramiento del piso; iluminación eléctrica; tribunas y otros detalles que dejarían a esa tradicional cancha de fútbol en condiciones de ser utilizada en certámenes de mayor envergadura.
Y mientras los directivos rojos piensan y proyectan con visión de futuro, la más que centenaria rueda del ex-molino harinero «San Juan» que fundara Juan Labat en el año 1876, sigue abandonada entre los pastizales.
Cabe recordar que fue retirada de su emplazamiento primitivo para construir el albergue, con la obligación de ser ubicada una vez terminada la obra. El edificio fue habilitado hace varios meses; la rueda declarada como Patrimonio Histórico Municipal, continúa durmiendo el sueño pesado del olvido.