La noticia sonó rara, muy fuerte, impensada, incredula, triste. Databa del fallecimiento de Ezequiel Jatip, joven de 31 años, empresario y deportista ayacuchense que por razones comerciales residia en la ciudad de Chivilcoy. Una indisposición orgánica había puesto fin a una vida rica en diversos matices.
Aún suenan los ecos de su resonante triunfo en un torneo nacional de fisicoculturismo, disciplina que abrazaba junto al rock, con pasión y mucho profesionalismo.
Lo recordamos en su paso futbolístico en donde se destacó integrando la división superior del Ateneo Estrada. Viajaba desde Chivilcoy a jugar y lo hacia realmente bien, siendo un arma importante en el ataque amarillo. Un delantero muy fuerte y veloz que dañaba por afuera. Siempre muy atento y educado llegando y saludando cortesmente. Agradecimiento las gráficas y alguna nota. El Eze Jatip un tipo bárbaro, un deportista innato.
Que decir de los comentarios siempre de interés que nos hacía su padre Buchi cuando nos contaba de la campaña de Ezequiel en el kart compitiendo desde muy temprana edad junto a pilotos de renombre en una zona muy tuerca y difícil como es la del oeste, prolongando la pasión de su padre y fundamentalmente de su abuelo Américo el recordado y querido Turco de brillante paso ganador por la limitada del 27 y un frustrado ingreso al TC debido a un accidente.
Falleció Ezequiel Jatip, quien puede creerlo ?, en la plenitud de su vida. Lleguen a sus seres queridos
y amigos nuestro fuerte abrazo y condolencias.
OMA