El domingo 13, falleció José Orlando Najurieta, conocido popularmente como «Cholo». Criollo hasta la médula, se distinguió por haber sido uno de los mejores jinetes en la historia local, regional, provincial e internacional. Si en sus «mocedades» hubiese tenido la oportunidad, sus mentas se hubiesen prodigado más generosamente a nivel nacional.
Extraordinario jinete «clinero», no le hizo asco a ninguna especialidad y en ese transcurrir de a caballo, fue resero, tropillero, domador y juez en innumerables jineteadas. Hace algunos años, al ruedo ubicado en la chacra municipal «Brig. Gral. Juan Manuel de Rosas», le fue impuesto su nombre como fiel y justiciero reconocimiento a sus incuestionables hazañas como jinete.
Si mal no recuerda quien escribe, fue el último exponente de una dinastía familiar de «gente de a caballo» y como tales, en mayor o menor medida dejaron impresos sus nombres con letras indelebles durante varias décadas. Sin lugar a dudas, un negro e intangible crespón de luto encabezará las futuras jineteadas, recordando a «Cholo» Najurieta, el bien llamado «Héroe del Prado de Montevideo».
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