Sergio Hoffman: » En Nueva York, concreté un sueño largamente esperado»

Desde siempre, a través de estas páginas, hemos seguido desde muy cerca la actuación del atleta ayacuchense, hoy radicado en Tandil, Sergio Javier Hoffman. Por lo tanto sabemos de sus logros, que permanentemente narramos en laverdadayacucho.com.ar.

Dueño de un curriculum pocas veces comparable, este notable deportista, es un ganador en pruebas de calle y en la pista. Destacado profesor que también desde hace unos años, vuelca en sus alumnos, todo el bagaje de conocimientos acumulados en sus años de prolífica labor.

Estuvimos contando lo realizado por Sergio en la principal maratón del globo terráqueo corrida en Estados Unidos hace pocos días y como colorario de ello le pedimos que nos narre parte de esa experiencia, inolvidable, que vivió en el país del norte.

Que nos dice 

» Quiero compartir con ustedes la enorme alegría y orgullo que viví en la reciente Maratón de Nueva York, uno de los eventos deportivos más emblemáticos y desafiantes del mundo. Este año la experiencia tuvo un significado especial, porque entre los más de 70.000 competidores que inundaron las calles de la ciudad pude estar presente, logrando así una meta fijada en la que hubo que poner mucho empeño y sacrificio»

» Pude completar la maratón en un tiempo de 2 horas, 31 minutos y 53 segundos, logrando el 15.º puesto a nivel mundial y el 144.º lugar en la clasificación general. Un resultado que habla por sí solo de la disciplina con la que encaré esta preparación, de la entrega y la fortaleza con la que tuve que recorrer cada kilómetro de la competencia».

» Esta carrera fue también una vivencia inolvidable. A lo largo del recorrido por los cinco distritos de Nueva York —Staten Island, Brooklyn, Queens, el Bronx y Manhattan— se vivió un ambiente indescriptible»

Sergio contó que en cada barrio parecía que el público se multiplicaba, como si la ciudad entera estuviera empujando a cada corredor con su energía, sus gritos de aliento y su emoción contagiosa. Esa fuerza colectiva, sumada a su propia determinación, lo acompañó hasta el último tramo. Dónde lo esperó, impaciente, su compañera de vida Noelia Vargas, que siempre lo alentó para que vaya en busca de la gloria.

Verlo cruzar la meta fue un momento emocionante, un recordatorio de que los sueños se alcanzan con perseverancia, pasión y muchísimo trabajo. Recordando aquel chico humilde que corría por nuestras calles con un único propósito triunfar en la vida. Su participación y su logro en esta maratón nos llenan de orgullo y admiración.

Sin dudas que esta actuación quedará para siempre como testimonio de un espíritu incansable, que muchas veces tuvo que ganarle a la adversidad.

Que esta experiencia sea solo una de muchas más que siga conquistando y que el ejemplo de su carrera deportiva, atestada de triunfos, llegue al resto de los corredores, que se inician en esta exigente disciplina atlética.

Sergio Hoffman:  » En Nueva York, concreté un sueño largamente esperado»

OMA