El 2022, pos-pandemia, con todas sus implicancias, transitó muy raudamente. Nos queda de este ciclo de 365 días, el recuerdo de una lucha franca y directa en la que fueron necesarios sucesivos reacomodamientos por los tumbos que dió la economía, acechada por la permanente y temida inflación que no otorgò tregua, desbalanceando la caja.
Todo ese combo generò incertidumbre en las empresas pequeñas y medianas como este diario centenario que, aunque más lento y encorvado sigue su camino, ventilando noticias, enterado de la ausencia de muchos compañeros de ruta.
Estamos en la antesala del 2023, que nos deparará ?, no lo sabemos. Sí que será aún más difícil podernos sostener y ganar la calle, pero lucharemos con todas las fuerzas que nos quedan para que así sea.
Levantemos las copas, clamando por ello y para pedir sentido común y transparencia a nuestra dirigencia, no exenta de buenas ideas y procederes, para así devolverle la alegrìa que merece largamente el pueblo argentino.
Que cesen las diferencias y que los que reciben menos, reciban màs y los grandes señores que tienen a su cargo la conducción del país, » dueños» de este suelo, miren y entiendan que hay una ciudadanìa detràs de ellos que sufre privaciones, nada menos que en el mejor paìs del mundo.
Para que ello deje de suceder, nuestros gobernantes, deberàn abandonar la zona de confort y que entre otras cualidades, la del trabajo y el mèrito sean las banderas que podamos esgrimir con legìtimo orgullo.
Salud amigos. Vaya un fuerte abrazo para los avisadores, autoridades, lectores y pueblo en general que siempre acompañaron a LA VERDAD!!!.
Direcciòn.