Los comentarios de la calle siempre están presentes y se conocen en los lugares públicos, bares, tiendas, súper, donde se encuentran los vecinos. Se suceden.
Así la pena inunda por el fallecimiento de amigos, la necesidad de colaboración para sostener inconvenientes de salud que trascienden en una sociedad pequeña donde todos se conocen, o están ligados por algún motivo. Pueblo chico….En ocasiones, la tristeza invade.
Entre otras llega la noticia del accidente vehicular en zona de Labardén-Guido, en donde pierde la vida una menor, al volcar e incendiarse un automóvil que era utilizado para competir en pruebas zonales. Deportista con relaciones en nuestra ciudad.
Más allá de esas noticias penosas, el parte de coronavirus que se entrega diariamente es altamente gratificante lo que pone en evidencia una vez más el excelente trabajo, sin fisuras, de la totalidad del Comité de Crisis, con la colaboración de parte de la población, para lograr llevar el número de activos a 14. Ello marca la responsabilidad y celo de una labor que ya cumplió un año sin solución de continuidad, en donde se evidencian distintos contrastes, como por ejemplo la irresponsabilidad de otra parte de la población, ya que se supo que han sido abortadas algunas reuniones masivas en donde claramente se rebasan las condiciones de protocolo, distanciamiento, cuidados, etc que se imponen en esta pandemia para evitar los contagios.
Ello hace que la tarea se duplique y obligue a estar atentos para controlar una ciudad que en sectores entiende la problemática y por otro cae en un relajamiento que puede acarrear complicaciones, máxime si tenemos en cuenta la peligrosidad de este virus que azota no solo a nuestra población, sino al país y mundo entero.