El rally: No faltó nada en el “curvón del Cuti”.

Lenta pero seguramente, el lugar fue siendo ocupado por quienes conocen sus emocionantes bondades, como por aquellos que han hecho de ese lugar una agradable y por ende tradicional costumbre. Nos referimos al denominado “curvón del Cuti”, o “curva” si se prefiere, en alusión a nuestro convecino “Cuti” Garraza, quien fue el primer ocupante de ese lugar, precisamente en la edición inaugural del Rally en Ayacucho. Está ubicada al final de la recta que partiendo desde la parte posterior del cementerio municipal, se presta para acelerar a fondo hasta el final, y frenar a partir de donde se pueda o considere técnicamente oportuno.

Aproximadamente a la hora 8 del sábado 3, unos cuantos “clientes” se habían preparado en ese sitio para observar las alternativas generadas por el primero de los pasajes del Rally Mar y Sierras” por el premio “Coronación”, que finalizó ayer domingo en horas de la tarde. Al poco estar de los expectantes expertos en polvaredas, de a poco fueron llegando a ese punto los protagonistas después de salir del intrincado laberinto establecido en el predio del Tiro Federal (antigua zona de tiro al blanco).

Cercano el mediodía comenzaron a prepararse los fogones. Aunque parezca un tanto insólito, de uno de ellos, el principal, previamente circularon las cazuelitas de barro conteniendo riñones preparados de manera artesanal en cuanto a lo gastronómico. Después, llegaron los bifes de carne vacuna y lanar, surgidos como por encanto de esa generosa parrilla. Todos los presentes fueron invitados a participar de este pantagruélico almuerzo a la criolla, a la par que en algunos gacebos levantados para protegerse del aplastante sol, otros aficionados también “quemaban carne” de manera abundante, generosa.

Hubo aficionados tuercas y no tanto, pilotos, mecánicos, agentes manteniendo un estricto control sobre el peligroso punto, y varias personas pertenecientes a una conocida empresa que al fin y al cabo fueron quienes aportaron la materia prima. Por supuesto que estas parrillas estuvieron a la orden del día en numerosos sitios estratégicos del circuito, pero cabe asegurar que esta fue muy especial por lo abierta, generosa y espontánea.

AGB