Cierto pensador indicaba, más bien alertaba sobre la imprudencia de observar un hecho y formar opinión cuando el eje visual y la mente se encuentra fuera de lugar. Como lógica consecuencia se equivoca el camino.
Si ello le ocurre a un fotógrafo, no logra el objetivo de una buena toma, que tendrá una falencia primaria. » Está fuera de foco», un error irreparable que obliga a empezar de nuevo.
El francotirador basa su poder de fuego y certeza milimétrica en una mira que fije netamente y con sensibilidad el objetivo a atacar. Si no encuentra dicho punto, el fracaso visitará su apostadero.
El cazador observará mejor su presa y el automovilista conducirá con mayor seguridad. Un ojo fino facilitará las cosas.
Lo mismo ocurre en todos los aspectos de la vida, incluso el periodista cuando ensaya una nota planteando sus preguntas básicas, » cómo, cuando, donde y porqué», cuenta con un arma letal en su mano. La tecla de una computadora o de su máquina de escribir, en donde vuelca su análisis. Si lo hace con el eje fuera de sitio, mal enfocado, seguramente su nota no transitará el camino real y puede desde el error, causar demasiado daño.
Hoy debemos cuidarnos, es una gran verdad y desde el espacio del hombre de prensa, colaborar haciendo docencia, indicar que se debe tomar distancia, explicar la importancia del uso de barbijos, estar del lado de quien tanto trabaja y nos cuida. Si nos apartamos de ello nuestra labor en lugar de ser empática obstruye y pone piedras en un momento en que se debe trabajar en equipo y acompañar. Esa distorsión es frecuente cuando se pierde el eje y la mira de la situación se torna borrosa.
Al enfocar bien, entenderemos que es mucho más importante la salud de los pacientes enfermos, el buen estado de la población y contagiados, que una mera confección del parte. Que informará sobre un número más o menos, pero que es trabajo y responsabilidad de los sanitaristas.
Detenerse en la comparación de la confección de un parte de prensa, su velocidad de armado con los de la gran ciudad, es enfocar mal. Por lo menos.
Hoy el Instituto Epidemiológico Nacional de Mar del Plata está desbordado, por ello no llegan los informes en tiempo y forma. Nada cuesta nada pues aguardar hasta la jornada siguiente. Nosotros no podemos hacer más que leerlos.
Por lo tanto, más allá de ese informe, será prioritaria la recuperación de los pacientes de Covid-19. A quienes hoy luchan con el virus, un fuerte abrazo. El foco bien centrado debe apuntar a ese objetivo.
Por lo tanto, cuidemos de no tener la mira corrida de su eje. OMA.