Por Enrique Taborda. Especial para laverdadayacucho
Sobre la ruta 50, en la intersección de la avenida Miguens a la entrada de Ayacucho por ese lugar, se levanta la primitiva «casa de los Fontana», donde vivió esta querida familia desde fines del siglo XIX, cuando llegaron los primeros inmigrantes italianos y se instalaron allí para trabajar una quinta de frutales y verduras.
La historia es conocida. Como tantos otros forjaron un porvenir que llega a nuestros días con el ejemplo del esfuerzo y la frente bien alta. El sitio familiar cambió de dueños, sin embargo los más ancianos todavía la recuerdan como «la casa de los Fontana». La suerte y la buena voluntad de los que sucedieron ha querido
que se encuentre habitada y conservada, con su corredor orientado a la salida del sol y el entorno de árboles que la resguardan del viento sur.Un verdadero monumento al pasado.
Al contemplarla nos ilusiona un buen cartel indicador de su historia, en ese lugar estratégico para la promoción turística del pueblo. El viajero reduce la velocidad, después de haber pasado la zona industrial -viniendo del oeste- teniendo a la vista el complejo Independiente y una de las rotondas de acceso a la ciudad, precisamente frente a «la casa de los Fontana».
Pueda que la iniciativa privada lo tenga en cuenta y la Municipalidad lo apoye con la promoción adecuada y el soporte logístico a un lugar tan apreciable.