El sábado 2 de julio, en el salón de eventos sociales del Ayacucho Cicles Club, fue agasajado por sus familiares y amigos, Pedro Héctor Moureu. El motivo principal se centró en sus flamantes ocho décadas de vida. Las muy sensibles y permanentes exteriorizaciones de júbilo y nostalgia alcanzaron otras dimensiones, puesto que partieron desde los mejores recuerdos juveniles y se entronizaron en el corazón.
Y el tremendo ciclista de ayer, que deparó a nuestro deporte más de trescientas victorias de todo calibre y color ( léase bien 300), conseguidas en base a su incuestionable calidad, fortaleza y responsabilidad, “flaqueó” en varias ocasiones al sentirse netamente superado por las emociones. Rodeado por un gran equipo encabezado por su esposa Marta y por todos sus hijos, el sorpresivo encuentro fue mayúsculo porque a escribir verdad, Pedro no se esperaba tamaño reconocimiento. Y ahí estaban casi todos los que debían estar, con la presencia de sus más cercanos amigos. Los de siempre.
En ese muy agradable transcurrir, contando como música de fondo el crepitar de los leños del fogón, se conversó de todo y para todos los gustos, tanto de ciclismo y automovilismo, como de otras cuestiones que generan esos amenos enlaces de vidas diferentes pero siempre unidos por la amistad y la camaradería. Como es obvio suponer, el cumpleañero vivió prolongados momentos de incontenible emoción a través de los sucesivos abrazos y las manos extendidas, de todos los presentes, viejos y jóvenes, a los que se sumaron bulliciosamente, los pequeños integrantes de un árbol genealógico formidable.
De esta forma Pedro Héctor Moureu ascendió anteayer sábado 2 de julio a un imaginario podio solo accesible a aquellas personas muy especiales, conquistado a fuerza de muchos sacrificios, de pasajes de flaquezas y de alegrías pero siempre marchando hacia adelante al conjuro de la extraordinaria fuerza que le insuflan a su cuerpo y espíritu ganador su esposa Marta, sus hijos Guillermo, Gabriel, Mónica y Natalia, y el resto, conformando un “pelotón” que empuja con irresistible fuerza.
Feliz cumpleaños Pedrito !!!!