El presidente del tribunal manifestó que la jueza Makintach, que protagonizaba un documental del caso sin consentimiento, “género múltiples discusiones en los cuartos intermedios y con los testigos y abogados”. Ahora el debate volvió a cero.
El juez Savarino afirmó que el juicio “no corresponde que se reanude” con la magistrada Verónica Di Tomasso. “Los suscriptos no podemos asumir nuevamente el debate porque escuchamos a 40 testigos y una imputada”, señaló.
“La única responsable es la jueza apartada”, dijo Savarino, a la vez que indicó: “Es una decisión ingrata”.
También dijo que todo se retrotraerá a la audiencia del 338, que es la etapa de presentación de pruebas. Además, marcó que tendrá que haber nuevos jueces: “Creemos que la causa tiene que sortearse en otro tribunal”.
Por su parte, la jueza Verónica Di Tomasso recurrió a una frase de Maradona para asegurar que el Poder Judicial no tiene la culpa de la nulidad: “La Justicia no se mancha”.
Este miércoles, la Suprema Corte de Justicia bonaerense había licenciado por noventa días a la jueza Makintach.
“Es lo que tenía que pasar”
La decisión fue escuchada por los siete imputados y los familiares de Diego en una sala tan tensionada como conmocionada por el repentino final del proceso. Con esta definición, el debate deberá reiniciarse desde cero.
Jana, Dalma y Gianinna Maradona escucharon la decisión de los jueces sentadas una al lado de la otra junto a Verónica Ojeda.
Luego de la resolución, el imputado Leopoldo Luque le dijo a los periodistas acreditados en la sala: “Supongo que es lo que tenía que pasar”.
Después cuestionó a la jueza Di Tommaso por afirmar en su breve intervención que el episodio de Makintach no representa a la Justicia: “La jueza diciendo la ‘la Justicia no se mancha’ mirando a las hijas de Maradona es una joda”. (DIB) MM