En horas de la mañana pudo leerse en redes sociales, la carta que un vecino covid-positivo, el médico veterinario Juan Carlos Garay hizo pública, refiriendo a su situación, la de su familia y la atención que se brinda en nuestro principal centro de salud a todos los internados por parte del personal profesional que allí trabaja.
Vale la pena divulgarla en nuestro medio, para enaltecer el trabajo altruista que se viene realizando desde que apareció esta maldita pandemia. Dice así:
» Buenos días; gracias a todos los que se preocuparon por mi salud y la de mi familia, yo internado y los demás en casa aislados, todos muy bien. A mí con suero y sin necesidad de
oxígeno por ahora. Espero no necesitarlo. La atención en este hospital es un lujo, más allá de lo edilicio que está excelente, impecable y la higiene al máximo. La calidad
profesional y humana de todas las personas que ingresaron a la habitación para atender el abuelo con quién comparto habitación o a mí no hay palabras para expresarlo y
agradecerlo. Están con el piso totalmente ocupado, no paran, se los ve caminar permanentemente por el pasillo. Me imagino lo cansados y saturados q estarán y sin embargo no bajan la guardia. Son excelentes. Seguramente quienes tienen responsabilidad por encima de ellos también lo son. Esto funciona así porque tiene que ser un equipo y todas son personas fundamentales en cada tarea que les toca hacer para que todo funcione así de bien en este hospital. Aunque a la mayoría uno no los vea, su trabajo y responsabilidad es muy importante también.
Mi agradecimiento a todos. Esperemos que pronto me pueda ir a casa y dejar la cama para alguien que la necesite más que yo. Muchas gracias, abrazo grande a todos»