La jornada de la víspera quedó marcada en el ámbito nacional y local por cambios y sucesiones de un nuevo período democrático. Se enlazaron uno que se va y otro que se inicia en un momento álgido, pero en el que como siempre se renuevan las esperanzas. Desde temprano con el juramento del cuerpo de Consejeros Escolares, el salón Libertador se vió colmado de gente de la política, pero también de amigos y familiares de los funcionarios que debían dar el puntapié inicial a sus tareas con el paso al frente de la jura.
Hubo de todo, quienes estuvieron y mostraron una faceta integradora, los que no y aquellos que por fin se acordaron de los medios de prensa que les hicieron pie para superar etapas, fundamentalmente las primeras, las más necesarias para lanzarse en la carrera política. De lo que es fácil olvidarse.
Queda apostar a caras nuevas, equipos renovados, que posibiliten una escalada en la calidad de vida de los argentinos y por ende de los ayacuchenses.
Gente que merece una existencia un tanto más holgada. Bien vivída…Si ello ocurre, hablará por sí solo de una gestión superadora en donde la integración sea la base como lo marcó el intendente y quede postrada por siempre la grieta por la que aún apuestan, claro que unos pocos, afortunadamente. Lo que tanto daña y divide. A todo esto, mientras todo busca acomodarse, el pueblo está mirando con atención.-
Adelante Sres.!!!
OMA